La Organización de Países Exportadores de Petróleo Plus (OPEP+) ha aprobado recortar la producción de petróleo en 2 millones de barriles diarios tras las recomendaciones de su comité de monitoreo.
El medio RT señala que este miércoles se celebró en Viena una reunión de los miembros del grupo petrolero, en la que los productores acordaron un profundo recorte de su objetivo de producción, frenando la oferta en un mercado ya ajustado a pesar de la presión de Estados Unidos para bombear más. Esta sería la mayor disminución en la producción desde el comienzo de la pandemia de covid-19.
The New York Times reportó a principios de esta semana, citando a una persona familiarizada con el tema, que Arabia Saudita, que lidera ‘de facto’ el grupo, estaba decidida a llevar los precios del barril de petróleo a unos 90 dólares. Asimsimo, se indicó que la OPEP+ optó por recortar la producción debido a que el mercado tiene un exceso de oferta, y la demanda se está atenuando por el debilitamiento de la economía mundial.
Jeff Currie, jefe global de investigación de materias primas en Goldman Sachs, también destacó que la razón por la que la organización puede reducir la producción, incluso cuando el mercado del petróleo sigue siendo ajustado con inventarios bajos, es que los precios del crudo han bajado más de un 40% porque los inversores huyen del mercado.
Antes de la reunión, había pocos indicios de que la presión estadounidense estuviera funcionando. El ministro de Energía de los Emiratos Árabes Unidos, Suhail Al Mazrouei, insistió en que la decisión era «técnica»: «Es muy importante que siga siendo una decisión técnica y no política», dijo a los periodistas. «Por eso es importante mirar el lado técnico de la ecuación y ver cualquier preocupación relacionada con la economía y el estado de la economía».
Mientras tanto, el presidente de EE.UU., Joe Biden, declaró que está «decepcionado por la decisión miope» de la OPEP+. «En un momento en el que el mantenimiento del suministro mundial de energía tiene una importancia fundamental, esta decisión tendrá un impacto más negativo en los países con ingresos bajos y medios, que ya se están tambaleando por los elevados precios de la energía», reza el comunicado publicado en el sitio web de la Casa Blanca.