Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU. dejó claro que Washington no abandonará su compromiso con Taiwán. Y así lo dijo durante su visita a esa nación, en un encuentro realizado en el Palacio presidencial de Taipéi.
Mientras, China continúa expresando su enfado por la visita de Nancy Pelosi a Taiwán y lo hace por tres vías: la verbal, la comercial y la militar. En cuanto a la primera, el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, calificó la presencia de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU. este miércoles en la isla de «completa farsa» y advirtió de que «quien ofenda a China será castigado».
«No abandonaremos nuestro compromiso con Taiwán y estamos orgullosos de nuestra amistad duradera», dijo Pelosi en una ceremonia junto a la líder de la isla, Tsai Ing-wen. «Ahora más que nunca la solidaridad estadounidense con Taiwán es crucial. Este es el mensaje que traemos aquí hoy», dijo enfática Pelosi.
Por su parte, Tsai señaló que la visita de Pelosi demuestra el firme apoyo internacional a Taipéi frente a una campaña de presión de años encabezada por Pekín. «Enfrentando amenazas militares deliberadamente intensificadas Taiwán no retrocederá», subrayó.